“Amad la Justicia, vosotros los que gobernáis la tierra” Libro de la Sabiduría.
Por Arturo Ismael Ibarra Dávalos.
Los mexicanos debemos aprender a debatir, sobre ideas, no sobre personas, con la finalidad de modificar y adecuar a las necesidades las instituciones del estado mexicano, debe hacerse con absoluto respeto a la dignidad a la que todos nos debemos; es necesario pulsar e impulsar los anhelos colectivos, de nuestra sociedad.
Sería prudente convocar a un foro participativo y plural dónde se reconozca el peso y la fuerza de los individuos, la firmeza de sus convicciones y su cultura personal, enfocando las mejores ideas y los grandes asuntos nacionales, dónde la tribuna esté abierta y disponible a todas las voces, a todas las ideas y a todas las tendencias, se debe hacer ante los vertiginosos acontecimientos que sacuden a la opinión pública nacional.
En el foro se pretende resuenen propuestas para resolverse de forma pacífica y democrática, las diferencias, que hoy dividen, sabedores de que el pueblo tiene una sabiduría política increíblemente más amplia y profunda que muchos políticos profesionales, aunque románticamente algunos estén de acuerdo con voces disidentes, pero el punto de unión es que todos rechacemos la vía de la violencia, cómo forma y método para resolver los grandes problemas nacionales.
Uno de los aspectos que se considera sobresaliente es discutir sobre la Justicia, el libro de los Proverbios lo dice de manera contundente: “los tronos se afirman por la Justicia”, sin ella agregaría San Agustín, los Estados no son más que “pandillas de salteadores”.
El Estado es y debe ser un organismo diseñado para servir a la sociedad, no para servirse de ella, para ponderar con justicia y equidad su riqueza o su pobreza…
Debemos guiar nuestros pasos con la imagen de Melchor Ocampo, desde nuestra perspectiva el mejor gobernante de Michoacán, en una de las más difíciles épocas de la historia de México, escuchar su corazón que tanto amó a nuestra Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, ya que aún se encuentra entre nosotros palpitando, en el Colegio Primitivo y Nacional de San Nicolás de Hidalgo, su espíritu científico, investigador y filosófico, debe de inspirarnos, puesto que aún se materializa en su biblioteca, sabemos que fue enciclopedista, naturalista y filósofo.
Dirigió su accionar político al servicio del pueblo, en sus palabras, por ejemplo, podemos entender la función pública que desempeñó, cuando dijo: “la patria está en peligro”, “la patria está en peligro”, “es hablándonos y no matándonos como debemos entendernos”, principio fundamental de todo gobierno, por ello es necesario que el foro deba hacerse bajo su advocación.
De él es esta frase, también: “vale más morir de pie, que vivir de rodillas” y murió de pie; él nos enseñó que mientras más fuerte es el hombre, o sea, mientras más poder poder concentra en sus manos, más mesura, cuidado y discreción debe poseer en palabra, gesto y acción, hacia los demás, jamás mostrar preferencia para sus allegados, tratar a todos con la misma cortesía, con auténtico respeto.
En ese foro se deben ventilar los asuntos estatales cada día más candentes, en dónde deben triunfar las mejores propuestas, más no, las peores injurias o denuestos; por eso el temario deberá versar sobre asuntos políticos, cómo la soberanía de nuestra entidad, relaciones entre ésta y la federación, para buscar observarlas y modificarlas. El desarrollo político, democrático- electoral del estado, exigiendo respeto irrestricto a las leyes en vigor, para que no haya conflicto postelectoral. ¡Ya basta!. Se debe postular la necesidad de hacer respetar la voluntad del pueblo, la que sea, la que se manifieste en las urnas electorales.
Michoacán de Ocampo, debe ser modelo republicano de ejercicio democrático; se debe discutir el desarrollo social, el crecimiento económico, en armonía con los recursos naturales y humanos tan valiosos, para que no sea Michoacán quién lleve el primer lugar en indocumentados en el extranjero, aquí necesitamos a todos ellos, para el desarrollo de nuestra sociedad, multiétnica, multicultural, de la familia, de la mujer, del hombre, común y corriente que forman la mayoría de los hogares michoacanos.
Del paisaje tan hermoso, de la historia, del arte universal, de la cultura, de la amistad, del progreso.
¿Existen sueños?, ¿existen ilusiones?, por supuesto sí, pero ello no quiere decir, que no estén a la altura de las necesidades reales y aunque difícil, no son de imposible realización…