El día de hoy en Tarímbaro, Michoacán, en las inmediaciones de la ex hacienda de Torreón, ubicada en la carretera Morelia-Salamanca, kilómetro 6.5, en la Casa Club, en la que se ubica el Club Campestre Erandeni, S.C., régimen de propiedad en condominio, se llevó a cabo, como se anunció en días pasados, asamblea informativa convocada por el Comité de Vigilancia, por dos de sus integrantes: Luis Jaime Cortéz y Estela Valadez, a fin de informar sobre temas detectados del Consejo Directivo a cargo de Gerardo Sánchez Martínez, Presidente, Isabel de Gracia Cervera, Secretaria, Roberto Verduzco Arceo, Tesorero, Marco Antonio Andaluz Reyes, Primer Vocal y José Luis Carrido Alcázar, Segundo Vocal y de su Gerente General Ezequiel Ramón Velderrain Campoy.
La Asamblea pretendió que los socios tengan más información de manera oficial y eficiente, para que las decisiones de los Consejos de Administración estén reguladas unificadamente.
Los estatutos facultan al Consejo de Administración más allá de lo razonable, y el Consejo de Administración, no el actual en particular, sino cualquier otro, podría portarse abusivo y tomar decisiones que afecten profundamente, en lo individual y en lo colectivo.
Convocamos a Asamblea. Cumplimos cabalmente con los protocolos legales indispensables. Señalaron enfáticamente.
Los usos y costumbres de nuestro club operan en favor de que no se informe. Destacaron.
El Consejo de Administración se ha negado drásticamente a facilitarnos la información que requerimos. Tenemos múltiples solicitudes de información a las que han respondido de manera negativa.
No nos “prestaron” el salón que es nuestro para hacer la asamblea, ni las sillas, ni los micrófonos, ni autorizaron el auxilio del personal.
No hemos podido tener la factura de la famosa barredora. ¿Cómo se compró? ¿Cuánto costó? ¿Qué empresa facturó? ¿A qué cuenta se pagó? ¿Con cheque o en efectivo? ¿Hubo algún proceso de licitación? Algo tan evidente y tan exigido de respuestas por todos como eso, no ha podido ser aclarado porque nos cierran la ventanilla de la información.
Sin embargo, el Consejo de Administración lanzó una demanda en contra de tres miembros de la administración de Raúl Díaz, y no sabemos si hubo una auditoría o algún proceso de validación que diera pie a tal demanda.
¿Por qué sólo se demanda a tres y no al total del Consejo de Administración? Y más aún: ¿por qué se les demanda antes de presentar oficialmente una auditoría que justifique una demanda?, Cuestionaron.
Un tema central es el del agua. Se convocó a una asamblea para “discutir” el tema, lo cual celebramos como indispensable y prioritario. Pero nunca se presentó un proyecto al respecto. De pronto apareció la convocatoria a una asamblea en la que se definía en la orden del día un conjunto de temas sumamente críticos, como un Convenio con COMAPAT, la fundación de una junta de Agua Potable y Saneamiento de Erandeni (APSE), y la aprobación para construir varias “plantas de tratamiento”. En vano solicitamos información. Se nos negó rotundamente. Denunciaron.
El convenio firmado con COMAPAT presenta una inconsistencia grave, pues en la Cláusula Segunda se menciona que la línea de conducción de agua potable al Club tendrá un costo de $554,177.08, según presupuesto anexado al convenio y realizado por el mismo Organismo, señalando que su construcción correría a cargo del COMAPAT, el cual absorbería “todos y cada uno de los costos que genere la obra…” y luego en la Cláusula Tercera, señala que el Club se obliga a entregar al COMAPAT la cantidad de 223 tubos de PVC de 6” por 6 m de largo, que se entiende son los mismos señalados en el punto 2 del presupuesto anexo; luego entonces es incorrecto decir que el COMAPAT absorbería todos los costos. Esto es una falta total de transparencia, a la cual están obligados los miembros del consejo.
Dudas similares tenemos, señaló Cortéz Méndez, en relación con la venta de terrenos del club. Esos terrenos, son nuestro patrimonio. Son de todos los socios. ¿Los podrán vender sin preguntarnos?
Cuestionan que el Consejo de Administración puede gastar los recursos exactamente como se le ocurra, sin dar cuentas de ningún orden.
No hay tampoco un organigrama. Ello provoca un caos de funciones, pero sobre todo una catástrofe de sueldos. En el análisis de la nómina hemos encontrado irregularidades graves, en las cuales una misma función tiene sueldos astronómicamente distintos en una persona que en otra. Destacó.
En su informe último, la administración de Alejandro Zepeda manifestó la “idea” de instalar una gasolinera a la entrada del club. ¿Hay la posibilidad de que se tome ese hecho como una autorización?
El lago ha sido contaminado de manera ya peligrosa para la salud, por aguas negras. Se ha reportado ese tema por numerosos socios, y el Consejo no ha hecho nada al respecto.
Se pregunta en la referida reunión: ¿Por qué a los golfistas se les permitió usar las instalaciones sin pagar ni un cinco, y en cambio a los futbolistas se les cobra y se les ponen mil exigencias? ¿Por qué no hay equidad al respecto? Además, según consta en la publicidad, los derechos por participar en el torneo se le pagan a un particular. ¿Hay alguna “huella” de esos recursos? ¿Cómo es que se operan con ese nivel de discrecionalidad?
Hay quejas reiteradas de varios socios en torno al trato sumamente desatento del gerente. ¿No debería ser el trato atento a los socios un requisito básico de la gerencia?
Por votación unánime se revocó en dicha Asamblea al Consejo de Administración, en completa calma. Aunque no estaba convocada para tal efecto, pero al analizar los socios las irregularidades, así lo determinaron, en concordancia con los estatutos que dan vida al club.También se mandató que el Gerente del club fuera removido.
Los nuevos integrantes del Consejo de Administración fueron los siguientes: Gerardo Castro, presidente, Patricia Caballero, secretario, Javier Arrollo, Tesorero. José Rubén Mireles, 1er. Vocal y María de la Luz Hernández, 2da Vocal.
Siendo ratificados como miembros titulares del Comité de Vigilancia Luis Jaime Cortéz y Estela Valadez, nombrando a
Jaime Miramontes; así también se nombró como suplente a Fernando Alcázar.
Debemos indicar que en nota pasada dijimos que el Consejo de Administración apoyado por tres miembros del Consejo de Vigilancia Moisés Hugo Torres Zambrano, Paris B. Sosa Cedeño y Luis Manuel Rojas Murillo, seguían dando de qué hablar. Al tratar de evitar que se diera la citada asamblea. No obstante que estén demandados de nulidad ante los juzgados civiles de primera instancia, como en notas anteriores se había referido. Confundiéndose tales miembros del Consejo de Vigilancia, quienes no están demandados de nulidad, sino solo el Consejo de Administración anterior. Lo cual fue solicitado en vía de réplica por parte de Paris B. Sosa Cedeño, lo que aclaramos para evitar confusiones.
Laborissmo seguirá informando…