Motivado y preocupado por lo que se ha ido conociendo de la realidad de la actual administración municipal, investigué y analicé algunos detalles de qué es lo que realmente han hecho Alfonso y el hippie con la policía municipal, y descubrí algunos datos interesantes, que tú mereces saber moreliano:
*Los números 1, 2 y 3 en la cadena de mando*, es decir, los que mueven los hilos en la policía municipal, *son realmente ex policías estatales*, formados y forjados en esa cantera, y corridos de esa corporación por diferentes motivos y en diferentes momentos:
El comisario Luis Felipe González Carmona, el director operativo Abraham Ramos Ramos, y el inspector operativo, José Pablo Alarcón Olmedo.
Lo que deja bien claro un tema: tiene más preparación y capacidad un policía estatal despedido que cualquiera de tus policías 100% certificados Alfonso, así lo consideran tú y el hippie ya que *USTEDES LOS NOMBRARON.*
Ahora otro tema interesante, *LA CARRERA POLICIAL*. No es una iniciativa del hippie y mucho menos de Alfonso, está definida en La Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en el capítulo II, y establece los lineamientos para el ingreso, la permanencia y las promociones. Seguramente alguno de sus costosos asesores les dijo que se lucieran mencionando el concepto, pero jamás se tomó la molestia de leer en qué consiste la carrera policial.
¿Han respetado la ley Alfonso y el hippie? Veamos qué han hecho estas dos personas que nos exigen obedecer las leyes y reglamentos a raja tabla:
¿Quiénes son los que ganan más dinero en la policía del hippie? Dejando de lado al comisario, ya conocido por todos y que sigue al mismo nivel en el que estaba, están sus directores, uno de ellos familiar del comisionado. ¿Cómo llegaron a ser directores? Todos ellos por el tembloroso dedazo del hippie ¿carrera policial? Para llegar a tener esos puestos se requiere, de acuerdo a las leyes: antigüedad en la institución, edad, estudios académicos, formación policial y certificación de C3.
*NINGUNO de sus directores cumple con los requisitos*. Eso sí, todos ostentan sus grados de policía primero y los cobran. La mayoría de ellos llegaron a la policía municipal de Morelia de la mano del hippie ¿de dónde vienen? ¡Adivínalo! Igual que el hippie, vienen del hermano estado de Guanajuato, lo mismo que el destituido oficial mayor Antonio Obregón y la actual jefa del departamento de recursos humanos, entre otros. ¿Por qué no hay prácticamente nadie originario de Morelia en esos puestos? Es más, ¿de Michoacán? Ni el director Ramos, ni la maestra Marcela, ni el psicólogo Oswaldo, bueno, de hecho, no pudimos encontrar a alguno. Está claro, para Alfonso los morelianos somos de segunda, somos mano de obra si bien nos va.
Y hay más. De los 197 policías que recibió Alfonso y le entregó al hippie, sólo tres han sido promovidos por sus obvias habilidades; pero eso sí, con menos de un año de servicio (lo que se considera un novato), han sido nombrados policías primeros casi 40 elementos, todos ellos y ellas jóvenes, demasiado jóvenes, eso sí, muy apuestos y al parecer muy apegados al hippie y a la maestra Marcela, como es el caso del joven Pablo Alarcón, rescatado después de haber sido dado de baja de la Policía Michoacán, llegando directamente a ser el tercero al mando y con nombramiento de policía primero (abajo están policías segundos, terceros y de carrera, con años de experiencia y pertenencia a la corporación, que simplemente han sido ignorados y pisoteados por Alfonso y por el hippie por el simple hecho de no ser sus amigos o familiares).
Ésta es la forma de gobernar y administrar de Alfonso Martínez, de la mano de una persona ajena e ignorante a las necesidades de nuestro municipio y de nuestra ciudad.
Laborissmo seguirá informando…